Si su flauta necesita volver al taller para algún servicio o reparación

La madera tiene muchas cualidades y es excelente para la construcción de flautas. Pero  es un material natural, que se mueve, es decir, que se modifica y reacciona en especial a la humedad. Por esta razón puede ocurrir que, a pesar de un rodaje cuidadoso y un mantenimiento adecuado, en un momento dado deje de sonar como al principio, se emboce muy a menudo, las notas agudas no salgan bien, o que experimente otro desgaste. Entonces es el momento de enviar su instrumento al taller de adquisición o a cualquier constructor de flautas de pico profesional. En la mayoría de los casos, se pueden corregir los fallos de sonido, respuesta y entonación de tal manera que el instrumento quede como nuevo.

En primer lugar, el instrumento recibe un número de orden que se introduce al ordenador con el nombre y la dirección del cliente para evitar confusiones y asegurarse de que cada cliente recupere su propio instrumento.

El constructor de flautas leerá entonces atentamente la carta del cliente con sus peticiones y probará rápidamente el instrumento para entender las peticiones del expeditor. A veces, el constructor se pone en contacto con el flautista por teléfono para aclarar alguna duda. Después sigue un estudio en profundidad del estado del instrumento y se planifica el trabajo de reparación. Si la reparación exige unas manipulaciones que superan las normales y/o  aparece un problema que no sale en la carta que acompaña el instrumento mandado, se le envía al cliente un presupuesto, de manera que pueda tomar la decisión si desea o no que se siga adelante con la reparación.

Ahora, según las necesidades, la flauta pasa por distintas fases de trabajo, hasta que repasada y cuidada, vuelve a su punto de salida. Se prepara la factura (si procede) y se vuelve a envíar el intrumento.

Puede haber muchas razones, pero lo más frecuente es que se haya ensuciado o deformado el canal. Se saca el bloque y se limpia. Con un estropajo metálico o una lima cubierta de papel de lija se limpia y se pule,  con especial atención a la bóveda del canal. Se practican las mismas operaciones con las aristas, la ventana y el LABIO. Si el canal está demasiado estrecho, se lima el bloque hasta que tenga la altura deseada y se ajusta la arista inferior.

En este caso también, en primer lugar, se revisan y se limpian el canal y el LABIO. En el caso de que se haya alterado el taladro, se le vuelve a dar la forma original mediante una escariadora. Se limpian los agujeros de los dedos y si es necesario se vuelven a ajustar.

Se quitan todos los restos de corcho que siguen pegados a la espiga, se limpia de pegamento, de aceite y de grasa. Se vuelve a pegar un nuevo corcho natural con una cola de larga duración.

Si las juntas están demasiado flojas, se reemplaza el corcho por uno más grueso. Si  están demasiado apretadas, se lima el corcho hasta que las partes de la flauta se deslicen de forma adecuada.

Muchas grietas pequeñas se pueden arreglar sin ningun problema simplemente pegando y limando. Incluso grietas grandes, a menudo se pueden arreglar fácilmente. Pero, en algunos casos, como por ejemplo en el caso de hundimiento del labio, sólo se puede arreglar cambiando la parte dañada del instrumento.

A menudo, el problema aparece debido a que el taladro o los agujeros se han hecho más estrechos. Se corrige el taladro con una escariadora, los agujeros de los dedos se limpian y si es necesario se hacen correcciones en el tamaño.

Se puede poner un anillo de marfil o cuerno artificial en el agujero del pulgar, devolviéndole la forma y tamaño original. (Esta reparación nunca entra en la garantía).

Se cambia la zapatilla y si es necesario se vuelve a ajustar la llave.

Se cambia el muelle de la llave, se limpia el eje de la llave , se le pone aceite, y si hace falta se cambia por uno nuevo.

Se insierta un corcho o un trozo de fieltro. A menudo, la zapatilla se ha vuelto inflexible y se tiene que reemplazar.

Estos son las reparaciones y peticiones más frecuentes. Además, cambiamos el bloque, recortamos la flauta, si la afinación general del instrumento es demasiado baja, ponemos nuevos anillos de cuerno artificial o de metal a la cabeza o al pie de la flauta, cambiamos el hilo de las espigas o ponemos llaves especiales.

Las flautas de pico tratadas cuidadosamente duran muchos años. Sin embargo, muchos flautistas no son suficientemente conscientes de que sus instrumentos necesitan con cierta regularidad de la mano de un constructor profesional. A menudo las reparaciones son eficaces y en la mayoría de los casos, los instrumentos recuperan su sonido.